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Rumi, sabio entre los sabios

Antes de tener mi propio negocio, trabajaba como ejecutivo de una multinacional. Solía ocurrir -como a muchos- que despertemos con una sensación de indefinible desasosiego, con una pesadez en la cabeza o en todo el cuerpo, y a veces afectados por una suerte de inseguridad, física y metafísica. Me pasaba con alguna frecuencia cuando en mis días de sometimiento a la alarma estridente en las mañanas, seguida del presentimiento de una jornada más, con frecuencia rutinaria y sin sentido. Preferentemente me ocurría los lunes.

Uno de esos días encontré estos versos de Yalal-ad-Din Muhammad Rumi, el poeta místico persa del siglo XIII, uno de los grandes representantes de la espiritualidad sufi. Según él, en la medida que el hombre se desarrolla en la invención de cosas necesarias para alimentar su ego -ese puro fantasma- ansioso de poder, de riqueza, de fama, se aleja cada vez más de sí mismo y hace cada vez más densa la muralla que lo separa de lo Uno, de lo Absoluto, que no solo parece sino que es.

Le preguntaron a Rumi, Maestro espiritual persa del siglo XIII:

¿Qué es el veneno?
- Cualquier cosa más allá de lo que necesitamos es veneno.
Puede ser el poder, la pereza, la comida, el ego, la ambición, el miedo, la ira, o lo que sea…

¿Qué es el miedo?
- La no aceptación de la incertidumbre. Si aceptamos la incertidumbre, se convierte en aventura.

¿Qué es la envidia?
- La no aceptación de la bienaventuranza en el otro.
Si lo aceptamos, se torna en inspiración.

¿Qué es la ira?
- La no aceptación de lo que está más allá de nuestro control.
Si aceptamos, se convierte en tolerancia.

¿Qué es el odio?
- La No aceptación de las personas como son.
Si las aceptamos incondicionalmente, a continuación, se convierte en amor.

¿Qué es la madurez espiritual?
  • Es cuando se deja de tratar de cambiar a los demás y nos concentramos en cambiarnos a nosotros mismos.
  • Es cuando aceptamos a las personas como son.
  • Es cuando entendemos que todos están acertados según su própia perspectiva.
  • Es cuando se aprende a "dejar ir".
  • Es cuando se es capaz de no tener "expectativas" en una relación, y damos de nosotros mismos por el placer de dar.
  • Es cuando comprendemos que lo que hacemos, lo hacemos para nuestra propia paz.
  • Es cuando uno para de demostrar al mundo lo inteligente se es.
  • Es cuando dejamos de buscar la aprobación de los demás.
  • Es cuando paramos de compararnos con los demás.
  • Es cuando se está en paz consigo mismo.
  • La madurez espiritual es cuando somos capaces de distinguir entre "necesidad" y "querer" y somos capaces de dejar ir ese querer…
Por último y lo más importante.
Se gana la madurez espiritual cuando dejamos
de anexar la "felicidad" a las cosas materiales.

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